viernes, 27 de mayo de 2016

MI QUERIDO ADOLESCENTE!!

Desde hace varios años,en mi trabajo con adolescentes, que por cierto es maravilloso y de un gran aprendizaje personal, me doy cuenta que a los padres les cuesta mucho trabajo comprender los procesos y cambios de sus hijos, creen que por que ya los educaron en la niñez, les dieron principios y una educación escolar, deben comportarse y cumplir las expectativas de los padres.
Les tengo noticias no es así, el adolescente normal no es obediente, el adolescente no es tolerante y mucho menos va a seguir las ordenes que le demos en el momento que nosotros como padres esperamos que las acaten.
Es una etapa del ser humano en la cual a las 7:00 a.m brinca de alegría y a las 7:10 a.m llora amargamente. El adolescente (hombre o mujer) está en plena búsqueda de su identidad, así que por lo tanto...... TODO le causa conflicto, está buscando su lugar en la sociedad, en su familia, con sus amigos, no tiene idea de que quiere, ni a donde va, solo está con mil preguntas en la cabeza y buscando encajar en algún sitio.
También los cambios físicos propios del desarrollo, hacen que en ocasiones se sientan acomplejados al compararse con sus compañeros, se presenta en algunos casos el acné, crecen más los brazos que el tronco y se sienten raros, se golpean con facilidad, ya que les falla la coordinación en sus movimientos, la ropa en ocasiones no se les ve como quisieran,en fin todo esto afecta a su estado de ánimo,   conducta y autoconcepto .
Los padres empiezan a perder importancia en la vida de un adolescente, y los amigos a tomar más importancia de la que nosotros quisiéramos.
Para nosotros como padres, el perder el control sobre nuestros hijos nos desconcierta, pero solo así ellos madurarán y crecerán, debemos permitir que cometan errores, por que ellos,  no van a aprender de lo que nosotros les digamos  que les podría ocurrir, en mi experiencia y en las conferencias que doy a padres de adolescentes, les insisto que nuestros hijos deben de probar de todo.... siempre y cuando no atenten contra su salud, su vida o la de alguien más, esto es, nada de drogas, alcohol y sexo sin protección, hay que tener en cuenta que estoy hablando de adolescentes de entre los 11 y los 21 años, si 21 años, hay quien madura antes y quien lo hace después, pero en ese rango la conducta del adolescente es francamente muy  poco estable.
Si les permitimos que se caigan de vez en cuando, ellos entenderán que hay que tomar un camino diferente de hacer las cosas , y se logrará el aprendizaje.
Cuantas veces no estamos viendo que se va a golpear (en forma metafórica claro está) y sabemos como padres que le va a doler, que va a llorar, pero es nuestro deber dejar que cometan sus errores, y también sabemos que ahí estaremos para apoyarlos, consolarlos y escucharlos, NO SE VALE EL " TE LO DIJEEEEEEE", Es mejor decir " QUE APRENDISTE DE ESTO". Tal ves en el momento estará muy molesto, pero llegara la reflexión, y te agradecerá que hayas estado ahí.
Los padres de los adolescentes solo tenemos que estar, observar ,aconsejar, y aplicar consecuencias si estas son necesarias.
Esto no quiere decir que seamos permisivos, un adolescente necesita limites y reglas; horarios bien establecidos para todas sus actividades, hablo de fiestas, reuniones, a cada edad le corresponden horarios diferentes, consecuencias diferentes y que sean directamente proporcionales a la falta que se haya cometido.
Tengamos cuidado cuando aplicamos consecuencias, castigar el ejercicio o deporte que practique no es opción, ya que es muy importante que no dejen de hacerlo, es la forma en la que su carga hormonal se desahoga.
Compréndanlos, acuérdense de ustedes a esa edad, como se sentían, si dimos buenas bases y principios, todo va a salir bien.
Un principio de oro "No te subas al ring", recuerda que tu eres el adulto y que si nos enganchamos en una pelea o discusión con nuestro adolescente, puede ser más perjudicial que beneficiosa, violencia genera violencia, gritos por consecuencia más gritos, y en ocasiones cuando nos enganchamos, decimos cosas que podrían fracturar la relación con nuestros hijos en forma permanente.
Si nuestro hijo hizo algo que está mal, o que falto a las reglas de casa, dile que lo que hizo tendrá una consecuencia y que se la dirás más tarde, y envíalo a su habitación, piensa la consecuencia que vas a aplicar, por que en ocasiones estamos tan molestos que ponemos castigos que tal ves no vamos a cumplir, si lo tomamos con calma y decidimos en forma tranquila, que consecuencia merece, vamos a mantenernos firmes ante esta y la cumpliremos para que la próxima vez que pudiera suceder lo mismo, nuestro hijo piense en ¿que podría perder?, si insiste en no seguir las reglas y repetir la conducta equivocada.
No te canses de decirle cuanto lo amas y lo importante que el o ella es para ti, ya que esto es fundamental, para su seguridad y autoestima.

Espero que esta información te sea de utilidad.
excelente fin de semana!!!


NO LUCHES CON TU ADOLESCENTE, ACOMPAÑALO EN SU PROCESO.

  Quiero abordar este tema, tan importante en la vida de los que somos padres de adolescentes, primero mostrándoles una carta que escribe un...